Después de caminar una semana en Rumania, paré a descansar unas noches en Budapest, y tomé un tren para llegar al segundo trekking de un total de cuatro, en Eslovenia.
¿Por qué Eslovenia?
En Enero de 2020 me encontraba en Nepal conversando con un alemán que aseguraba que en Eslovenia estaba el trekking más bonito del mundo. Quería comprobarlo yo mismo.
Un bus nocturno en donde no dormí nada me dejó a las 6 de la mañana en Ljubljana, la capital de Eslovenia. Tuve el centro de la ciudad al amanecer para mí solo.
Ese mismo día tomé otro bus a Kranska Gora, un pueblo que queda al borde del único parque nacional de Eslovenia: Triglav
La gente viene a Kranska Gora a hacer trekking y relajarse en esta laguna
Los Alpes Julianos en el Parque Nacional Triglav. Sin lugar a dudas uno de los lugares más bonitos que he visto
Está prohibido acampar en el Parque Triglav, pero en una semana no vi un solo guardabosques monitoreando. Y como yo no hago fogatas y me llevo mi basura, me di el privilegio de acampar de todos modos
Ducha diaria en un riachuelo
Hay decenas de refugios repartidos por todo el Parque. Puedes parar a tomarte un café y comer un plato casero
Este día cumplí un año de viaje sin volver a Chile
Plato típico en Eslovenia. No me acuerdo el nombre, pero era carne molida acompañada con un repollo fuertísimo
En este parque también hay un centro de Ski donde la gente viene a saltar tanto en invierno como en verano. Paré por una hora a ver a esta gente loca que eligió como deporte volar por los aires como ardillas. Lo que más me llamó la atención fue que cuando aterrizaban no decían nada, parecían robots. Yo estaría gritando por la adrenalina!
Hubo un día en que calculé mal la comida y tuve que caminar hasta las cuatro de la tarde en ayunas. Finalmente llegué a un pueblito y me comí la mejor pizza de mi vida.
Ya cansado después de varios días de trekking, terminé de caminar en Ukanc, me bañé en la laguna, y empecé a hacer dedo para llegar a mi tercer trekking del mes en Dolomitas (Italia).
Juan Pablo Toro Autor Deportista Nómade
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