Una alternativa a la disciplina para hacer más deporte

Cuando se trata de desarrollar un hábito de hacer deporte todos los días, un error muy común es poner todas las fichas en la fuerza de voluntad y la autodisciplina.

Decimos: “Voy a empezar a hacer deporte todos los días. Cada mañana saldré a trotar y después haré una rutina de flexiones y abdominales”.

Logramos completar el primer día. Estamos molido, porque nuestros cuerpos no está acostumbrados.

A pesar del cansancio, logramos completar el segundo día, porque no queríamos ser la persona que se rinde tan rápido.
Ahora si que estamos cansados.

Al tercer día ni pensamos en ir a entrenar.

Repetimos este mismo proceso, pero en tres meses.

El error es que estábamos confiando en que tendríamos desarrollados una autodisciplina que nunca antes habíamos necesitado usar, la cual se disipó apenas llegó el cansancio y la situación se puso difícil.

La autodisciplina es una habilidad que se desarrolla con el paso de los años. No llega de un día para otro. No conviene confiar en ella cuando uno está empezando a hacer deporte.

Permíteme proponerte una alternativa a la autodisciplina para ayudar a que hacer deporte sea más fácil:

Ser parte de un grupo de entrenamiento.

Sin que te dés cuenta, te sentirás motivado y serás consistente, porque no querrás ser el que le falla al grupo. Ahora eres parte de una comunidad, y uno no puede llegar y fallar a la comunidad sólo porque está cansado.

Eso sí, hay que tener en cuenta algunas cosas:

Lo primero, es que es crucial considerar qué tan entretenida es la actividad que elegiste, y qué tan simpática es la gente del grupo.

Hay decenas de opciones a elegir para alcanzar un buen estado físico. Gimnasio, tenis, padel, trote, fútbol, bicicleta, yoga, montañismo…

¿Para qué elegirías ir a clases de spinning si no te gusta pasar una hora jadeando o que una profesora te grite?

¿Para qué elegirías ir a pilates si odias sentir que tu guata se quema por una hora?

Y si te gusta el deporte que elegiste, pero no te cae bien la gente del grupo, conviene cambiarse de inmediato a otro recinto, y seguir cambiándose hasta que encuentres a tu comunidad. Esto hace que hacer deporte sea una actividad entretenida con amigos.

Lo segundo, es que hay que tomar en cuenta que cuando uno empieza a hacer un deporte o entrenamiento nuevo, lo normal es ser el más débil del grupo.

No es fácil ser el eslabón débil de un grupo. Requiere aceptar que uno va a pasar vergüenza de vez en cuando. Pero ayuda a pasar vergüenza saber que pasarás vergüenza, ¿no?

Por último, tener en cuenta la importancia de partir suave con un deporte nuevo. Si no, te puedes lesionar por meses y vuelves al punto de partida. Un buen estado físico se desarrolla después de años de actividad física moderada, parando a descansar cuando tenemos algún dolor.

La mejor parte de sumarte a un grupo para hacer deporte es que, sin que te dés cuenta, después de unos años habrás desarrollado la autodisciplina necesaria para entrenar todos los días.

Con el paso del tiempo, sin importar si eres parte o no de un grupo positivo, de todos modos vas a querer moverte un poco todos los días. Porque ahora sabes, por experiencia propia, que cuando haces deporte a diario tu cuerpo se siente mucho mejor, y estás mejor de ánimo.

Juan Pablo Toro
Juan Pablo Toro

Autor Deportista Nómade

Los tres beneficios y el gran problema de viajar con bajo presupuesto

Hay tres beneficios y un gran problema de viajar con bajo presupuesto diario.

El primer beneficio de viajar con bajo presupuesto es que tu viaje dura más.
Obvio.
Si tienes ahorrado mil dólares y tu gasto diario es de cien, tu viaje dura diez días.
Si tienes ahorrado mil dólares y tu gasto diario es de diez, tu viaje dura cien días.

El segundo beneficio es que viajar con bajo presupuesto te enseña a vivir bien con poco. Aprendes a ser consciente de tus gastos, y te la piensas dos veces antes de comprar algo que sabes que no necesitarás. Además, aprendes a estar cómodo a pesar de que duermes en una carpa o en un hostal barato, sin ningún tipo de lujos.

Si por cualquier motivo en un mal momento de tu vida llegas a perder todas tus posesiones materiales, te sentirás un poco más preparado para enfrentar la situación, en comparación con nunca antes haberte puesto en una situación de saber vivir bien gastando poco o nada.

El tercer beneficio de viajar con bajo presupuesto es que aumentan las aventuras.

Si tu presupuesto diario es de doscientos dólares al día, tienes un incentivo enorme a dormir en una pieza privada todos los días.
¿Cómodo? Sí. Pero no te pasará nada digno de recordar.

Si tu presupuesto diario es de quince dólares al día, estás obligado a buscar un lugar donde dormir sin tener que pagar. Esto te da de inmediato una ola de incertidumbre, y las emociones se van acentuando a medida que se acerca la noche.

A veces, terminas acampando en un lugar increíble. Un bosque o un desierto que jamás habrías conocido si es que hubieses tenido la disposición a pagar por ese hotel caro.

Otras veces está lloviendo fuertísimo, y sabes que si acampas en la intemperie lo vas a pasar mal. Entonces tocas la puerta a una casa a orillas del camino. Te abre la señora Juanita. Le preguntas si hay algún lugar con techo o una bodega donde puedas armar tu carpa de forma segura. La señora Juanita termina invitándote a alojar. Te duchas, te presenta a su familia, comen juntos, y te prestan una cama. Terminas quedándote con ellos por días, porque te llevas increíble con ellos.

No puedes creer la bondad de esta gente. ¡Tú sólo querías un techo para protegerte!

El gran problema de viajar con bajo presupuesto es que tienes un incentivo a ser tacaño.

Si tienes un presupuesto de diez dólares al día, no hay mucho espacio para ir al supermercado y comprarle vino y chocolate a la señora Juanita a modo de retribución. A veces puedes llegar a sentirte mal porque una persona te dio muchísimo, y tú en cambio no le estás dando nada de vuelta. Entonces ofreces a ayudar un poco en la casa o en la huerta, pero aun así esta ayuda no se siente suficiente como para pagar de vuelta todo lo que esta gente hizo por ti.

Dicho todo esto, acá va mi propuesta: sin importar si tengas muchos o pocos ahorros, elige viajar con un presupuesto diario bajo, pero sin incluir en ese presupuesto lo que invitas a otras personas.

Si tu viaje dura menos porque todos los días estabas dándole comida a los demás, vale la pena.

Juan Pablo Toro
Juan Pablo Toro

Autor Deportista Nómade

La gran vuelta de los Balcanes, parte II

En la parte I de mi vuelta por los balcanes muestro a través de fotos mi paso por los primeros cinco países: Bulgaria, Norte de Macedonia, Kosovo, Montenegro y Bosnia y Herzegovina. Me tuve que saltar Serbia porque no sabía que no se podía cruzar desde Kosovo a Serbia por tierra.

En esta segunda parte llego a Croacia, y empiezo a pedalear en dirección sur para llegar a Grecia, pasando nuevamente por Montenegro, y cruzando Albania.

Croacia

En la frontera para cruzar a Croacia me detiene un policía amenazante que me pregunta «Tienes drogas?». Yo le digo que no. Él me dice que si le paso las drogas, me deja ir sin problemas, pero que si no se las paso y él las encuentra, me encierran cinco años. Yo insisto en que no tengo, pero al mismo tiempo me empieza a preocupar que alguien me haya metido algo en las alforjas cuando no estaba atento (he escuchado historias similares). El policía me mira fijo a los ojos y me deja pasar sin revisarme.
Croacia!
Me subo a un ferry gigantesco en donde sólo estoy yo y una persona más
La parte de Croacia que nadie te muestra
Típico pueblito que se ve en la orilla, con edificios de colores claros y techos naranjos
Habiendo llegado en Noviembre, me toca Croacia para mí sólo y con buen tiempo
Vista desde la carpa
Tomo otro ferry para llegar a una de las islas más bonitas que he visitado: Mljet
Ese no es el sol, es la luna! Nunca la había visto así de brillante. Se podía pedalear en la noche sin necesidad de usar una linterna. Aquí es cuando lamento no saber más de fotografía, porque el paisaje era mil veces mejor de lo que se ve en esta foto
Acampar en Mljet estaba prohibidísimo! Y me costó muchísimo encontrar un escondite. Terminé acampando a orillas de una laguna y justo encima de un sendero de caminata, aprovechando la luna llena para no prender mi luz y así me aseguro que no me multen
A la mañana siguiente ordené todo antes de que saliera el sol, para irme a la segura de que no me vean
No sólo no habían turistas, sino que tampoco habían croatas. Estaba todo cerrado. Paisajes paradisíacos para mi solo! No podía estar más agradecido
Volví al continente, y de pura suerte encontré una playa increíble para acampar. A continuación voy a mostrar varias fotos del mismo lugar, porque debe estar entre las top 3 acampadas que he hecho
Justo antes de que salga el sol
Desde afuera de mi carpa podía mirar a los peces y un pulpo que hacía todo tipo de rarezas
Dubrovnik! Ciudad muy turística que se hizo más famosa aún porque aquí se filmaba Game of Thrones (la ciudad King’s Landing)
Obligado a hacerle caso al cartel
Buscar una banquita para sentarse en el campo. Armar un picnic de pan con queso, salame y aceite de oliva casero. La vida es buena

Montenegro:

De vuelta en Montenegro, camino a Kotor
foto desde el hostal en Kotor
Kotor visto desde el otro lado del lago
último día en Montenegro

Albania:

Albania!
«Te puedo copiar la tarea? Te prometo que la cambio un poco»
Acampé en una casa en construcción llena de murciélagos
Enver Hoxha fue un dictador que gobernó Albania entre 1944 y 1985. Le daban terror los ataques nucleares, así que mandó a construir más de 750.000 búnkers repartidos por todo el país para proteger a la población
Personalmente diría que Albania fue el país con los peores paisajes de los balcanes. No porque era feo, sino porque los otros eran impresionantes. Eso sí, creo también que la gente es la mejor!
Día de descanso. Usar la bici sólo para comprar frutas y verduras
Después de parar a almorzar aquí tuve que cruzar una montaña muy empinada. No me paró de llover en toda la tarde

Grecia:

En mi primera noche en Grecia no paraba de llover. Intentaba meterme a edificios abandonados, pero todos estaban custodiados por perros. Finalmente decidí acampar en la terraza de esta iglesia que se ve en la foto. Poco después empezó la verdadera tormenta, con rayos y viento y lluvia torrencial
Yo sabía que nadie me iba a molestar en la noche porque la iglesia estaba pegada a un cementerio. Por lo general la gente le tiene miedo a ir a cementerios en la noche
La lluvia caía sobre el masetero que se ve a la izquierda, y después pasaba hacia el piso. Se me mojó toda mi ropa de cambio, mi colchoneta, mi saco de dormir y mis electrónicos
A las 6 am llega el padre a cargo de la iglesia, y se sorprende al verme acampando. En vez de echarme a patadas, me pidió educadamente que ordenara todo rápido y me regaló pan para tres días
Por fin! un poco de sol. El pronóstico anunciaba diez días seguidos de tormenta
poco antes de la siguiente lluvia
Me pilla una tormenta con granizos enormes que me azotan todo el cuerpo. Entre adrenalina y la intensidad del entorno yo estaba disfrutando como nunca
llegué a refugiarme a un restorán al lado de esta señora que tenía una de las sonrisas más lindas que vi en el viaje
Esta foto resume super bien mi paso por Grecia: la mitad del tiempo con sol, la mitad con lluvia
Estaba anunciado lluvia torrencial para la tarde, pero sorpresa! Se despeja por dos horas. Entre que tenía todo mojado y que sabía que un rato llovería denuevo, disfruté este sol como nunca
en esta parte de Grecia la tormenta siempre viene desde el oeste, y uno puede ver cómo se acerca hacia tí
Parece que le puse mucho aire a mi rueda trasera, porque después de tomar un café en un pueblito, me subo a la bici y la rueda explota. Justo al lado había un perro que casi se infarta con el ruido y a la vez hace un amago para morderme por pura irracionalidad. Cada vez que pienso en esto me río
Se acerca de inmediato este amable señor y me lleva en auto a otro pueblito para comprar una rueda nueva. La gente es buena!
Grecia es un país increíble para pedalear. Caminos lindísimos con poco auto
¿Qué tal este atardecer?
Todos los días hacía un esfuerzo por encontrar una playa donde acampar
Grecia tiene playas bonitas a donde sea que vayas
otra tormenta más
Vuelvo al norte para visitar una isla llamada Zakynthos
¿Qué venderá este señor? me arrepiento por no haberle comprado
Subir, subir, subir! camino a una de las playas más lindas del mundo
Navagio beach para mí solo!
Después de Navagio Beach, paro a rellenar mis botellas en un monasterio griego ortodoxo de 500 años con unos monjes simpatiquísimos
Acampando en una plantación de olivos
Mi último destino del viaje con la bicicleta: la isla Cefalonia. Aquí conocí a Vangelis, el papá de un amigo, quien me alojó por dos noches. Muy buena compañía! Se nos pasaron un poco los tragos. Cosas que pasan. Le regalé mi bicicleta a él y su familia
Tomé un bus a Atenas, y aproveché de visitar la Acrópolis
Fin! Después de esto pasé una semana visitando amigos en Francia (la cyclofamily), y tomé un avión de vuelta a Chile después de 16 meses de viaje

La gran vuelta de los balcanes relatada en fotos, parte I

Después de haber pedaleado por un año, haber hecho trekking por cuatro semanas y haber descansado cuatro semanas en los países Nórdicos, volví a la bici en Octubre de 2022 para pedalear dos meses en la región de los balcanes (ex-Yugoslavia).

La idea era visitar cada uno de los países de esta región. Como ya había hecho trekking en Rumania y Eslovenia, me faltaban Bulgaria, Norte de Macedonia, Kosovo, Montenegro, Serbia, Bosnia y Herzegovina, Croacia, Albania y Grecia.

En este artículo hay fotos de los primeros cinco países visitados. El primero fue Bulgaria.

BULGARIA:

Durmiendo en un bosque a las afueras de Sofía, una de las ciudades que menos me gustan en el mundo
Tuve la suerte de llegar a los balcanes en pleno otoño
Casa típica que se ve en Bulgaria, con una mesita afuera donde se venden frutas
No te voy a mentir, no soy fan de Bulgaria. Conocí gente buena, comí rico y vi paisajes bonitos, pero sólo se necesitan un par de pelotudos en el camino para que tu experiencia en un país no sea positiva. En Bulgaria conocí a varios pelotudos

NORTE DE MACEDONIA:

Acampando bajo la luna llena en un campo de Norte de Macedonia. Cuando hay luna llena uno puede cocinar y leer sin necesitar linterna
Si me pagaran un dólar por cada tortuga que rescato a lo largo del camino, ahora tendría un dólar
Estuve a punto de llevármela conmigo. Supongo que me habría convertido en el primer chileno en la historia que viaja por el mundo en bicicleta acompañado por una tortuga
Me encontré con una pareja de cicloturistas alemanes, Stella y Linus. El día anterior encontraron un cachorrito a orillas del camino y lo rescataron. De nombre le pusieron «Little Pablo». (fuera de Chile le digo a la gente que mi nombre es Pablo, porque nadie sabe decir Juan.
Acampando en un campo con las manzanas más ricas que he probado
¿Se considera robar si le sacas una manzana a un árbol en el campo de otro? ¿Y si la recoges del piso? Pensaba en este tipo de cosas mientras disfrutaba de una manzana que saqué de un árbol
Llegué a Ohrid, el pueblo más bonito de Macedonia
Días de descanso en Ohrid
En Ohrid tuve el privilegio de conocer a Pete Gost, un británico que ha viajado más de 130.000 kilómetros por el mundo en bicicleta. Él fue una de las personas que inspiró. Compartimos una pieza por dos noches, y él se quejaba porque yo roncaba y hablaba dormido. Pasábamos todo el día hablando de viajes y de la vida. Su instagram es «petegost»
La bicicleta de Pete es la de la derecha. Llevaba casi la mitad de peso que yo. Un hombre con experiencia
También me volví a encontrar con Stella y Linus
Pasamos una tarde entera bañándonos en un muelle y tomando cerveza. De los mejores días del viaje
Rojo otoñal
Secando la carpa con los últimos rayos de sol

KOSOVO:

Azul: reconoce a Kosovo como país
Rojo: no reconoce a Kosovo como país
Verde: se la está pensando si reconocerlo o no
¿Qué tanto se la piensa Chile? ¡Que somos complicados pa nuestras cosas!
En mi primera noche en Kosovo conocí a estos dos cicloturistas que venían empezando su viaje por el mundo, y me mostraron las maravillas que uno puede comprar por cincuenta centavos en las panaderías de Kosovo
¡Problema! Mi idea era viajar desde Kosovo a Serbia, pero Serbia no reconoce a Kosovo como país y no te deja cruzar la frontera terrestre. Debido a eso, tuve que ir directamente en dirección a Montenegro y perderme visitar Serbia
Entre Kosovo y Montenegro había una montaña enorme. Estuve todo el día subiéndola motivadísimo. Y ya al final del día, cuando acampaba, me di cuenta que no había paso fronterizo en ese camino. Me tuve que devolver por donde vine
¿Es un error haber subido ese camino si me llevó a ver paisajes como este?
Todas estas fotos eran parte del camino «erróneo»

MONTENEGRO:

Eventualmente llegué a Montenegro, y fui feliz
Otoño!
Todos los días buscaba un río cristalino para bañarme como Dios me trajo al mundo
Pasé días y días cruzando montañas para llegar a un pueblito llamado Zabljak, donde me alojé en un «hostal» que era básicamente arrendarles una pieza a una familia que vivían en una cabaña diminuta. En esa casa tanto los papás como los niños hacían competencia de quién era el más raro
Paisajes que se ven en Durmitor National Park, Montenegro
Cruzar este parque nacional fue de lo más bonito que vi en el viaje. Aparte, no habían turistas, ni autos, ni ruido. Y los días me tocaron soleados
Con tanta montaña, los frenos de la bicicleta se me gastaron por completo, y justo antes de encontrar un taller me tocó bajar una montaña empinadísima. Fue adrenalínico
A través de booking llegué a alojarme con esta serbia. Era simpatiquísima, pero no era capaz de entender que yo no hablaba serbio. Estuvimos horas conversando ella en serbio y yo en inglés, y ninguno de los dos entendía nada

BOSNIA Y HERZEGOVINA:

Bosnia, país azotado por la guerra
Qué le hicieron a este Jesús!
¡Sorpresa! En Bosnia pescaron una vía de tren abandonada y la convirtieron en ciclovía. Estuve un par de días pedaleando por una ciclovía plana que cruzaba valles lindísimos
Pinchazo número 1.000.000
Alojé en el jardín de este restorán, y el dueño me invitó un licor de Bosnia que me curó de inmediato
Después de un par de días la ciclovía se convertía en un camino descuidado que pasaba por unos túneles oscuros como boca de lobo que estaban plagados de murciélagos
Llegué a Mostar, uno de los pueblos más famosos de Bosnia. Aprendí sobre la guerra que hubo en este país unos cuantos años atrás
La gente en Bosnia es simpatiquísima

A continuación: la gran vuelta por los balcanes parte II (Croacia, segunda vez en Montenegro, Albania y Grecia).

Círculo Polar Ártico, relatado en fotos

Agosto, 2022:

Desperté de una siesta en Budapest con el siguiente pensamiento: «¿Por qué todos los exploradores de National Geographic van a lugares remotos como el Círculo Polar Ártico, y yo no? ¡Qué envidia!».

De inmediato busqué un pasaje a Svalbard, en el círculo polar ártico, y me di cuenta que no eran tan caros. Compré un pasaje para finales de Septiembre de 2022.

Mi familia me vino a ver a Escandinavia por dos semanas. Me despedí de ellos en Estocolmo, tomé un tren a Oslo, y después tomé un avión a Svalbard
SVALBARD!!! En el paralelo 78°
Está lejos
Longyearbyen es el pueblo más grande en Svalbard, con aproximadamente 2000 habitantes. En la isla hay más osos polares que personas
Longyearbyen es una zona supuestamente segura de osos polares, pero la gente de todos modos camina con escopeta en la espalda. Por si las moscas
Edificio minero abandonado cerca de Longyearbyen
Me bañé tres veces en el mar Ártico. Dejémoslo en que placentero no era
Erwin, antropólogo francés con quien que pasé toda la semana en el mismo hostal
Post baño
Sí, en el ártico hay ciervos.
No, yo tampoco sabía.
Los tours en Svalbard son CARÍSIMOS, pero al mismo tiempo, es la única forma de salir de Longyearbyen con la seguridad de que no te coma un oso polar. Pagué un paseo en bote de todo el día para tratar de ver un oso polar
Navegamos por una zona inhóspita donde se veían ballenas
Unos paisajes lindísimos que te dan esa sensación de que estás en un lugar duro y remoto, definitivamente no amigable para humanos
En esta foto hay una cabaña (en la orilla). Ahí en el siglo pasado se quedaron atrapados un par de decenas de mineros jóvenes durante todo un invierno. Lograron cazar su comida para sobrevivir, pero se envenenaron con la pintura de las latas en conserva que hervían en una olla. Tuvieron una muerte dolorosa que incluyó volverse loco a punta de alucinaciones
En el tour visitamos un pueblo abandonado de la Unión Soviética llamado Pyramiden
Los rusos querían mostrarle al mundo que podían prosperar en un lugar tan duro como este. Y definitivamente lo lograron
Caminábamos con una guía rusa que cargaba un rifle e su espalda, quien nos aseguraba que sería capaz de defendernos de un oso en el caso de un ataque. Yo no le creía. ¿Qué tan segura puedes estar de que vas a lograr disparar y matar a un oso que viene corriendo hacia tí?
Recorrer Pyramiden era rarísimo. Te podías imaginar la vida en este pueblo en los tiempos que prosperó
Actualmente las aves anidan en las ventanas
Bar del pueblo
Otro ciervo
Tenían hasta piscina!!
Y gimnasio
Estatua de Lenin, obvio
Lamentablemente no vimos osos polares, pero nos llevaron al glaciar más bonito que he visto. Me sentí pagado
Ballenas que se ven por Svalbard
Con amigos del hostal de Francia, Bélgica, Eslovenia y Rusia visitamos la Global Seed Vault. Leer descripción en la siguiente imagen
Después de Svalbard volví a Oslo. Tenía que esperar dos noches para tomar un avión a Rumania. En vez de quedarme en la ciudad, fui a un bosque sin gente con cinco litros de agua, e hice un retiro solitario de meditación y ayuno, sin señal. No comí en 36 horas
Juan Pablo Toro
Juan Pablo Toro

Autor Deportista Nómade

La técnica del elefante para alcanzar metas

¿Cómo nos comemos un elefante completo?

Un bocado a la vez.

Completar una maratón puede sonar como una meta demasiado grande. Tan grande, que sólo pensar en esos 42 kilómetros puede provocarnos ansiedad y que nos retiremos sin ni siquiera haber empezado.
Si en lugar de enfocarnos en la distancia completa nos concentramos en hacer bien el próximo kilómetro, la tarea se ve más simple y alcanzable.
Poco a poco los kilómetros se van acumulando, y estás en el kilómetro 41, y tan sólo te falta un bocado más.
Si quieres que la meta sea más chica aún, enfócate sólo en el siguiente paso, así como lo hace Dean Karnazes.

Escribir un libro de cientos de páginas también suena como una meta demasiado grande como para lograr completarla.
Pero si decides, en lugar, escribir 500 palabras al día (un par de párrafos), con el paso de los meses estás a sólo 500 palabras de terminar tu primer borrador. Sólo te falta un bocado más.

En vez de enfocarse en perder treinta kilos de peso, que la mente esté en la próxima comida y el próximo entrenamiento.

En vez de enfocarse en leer cincuenta libros al año, que la mente esté en las próximas diez páginas.

Para los que viajan en bicicleta: en vez de enfocarse en pedalear miles de kilómetros por quién sabe cuántos países, elegir concentrarse en llegar al siguiente pueblo , a diez kilómetros de donde uno está. Acumular unos cuantos pueblos hacen 80 kilómetros al día, y varios días de 80 acumulan miles de kilómetros.

Dividir una meta grande en tareas fáciles de completar, de manera tal que no nos angustiemos pensando en el final y podamos ser consistentes con nuestro trabajo.

Dejar que el tiempo haga lo suyo.

Sin darnos cuenta,  nos habremos comido el elefante completo.

Juan Pablo Toro
Juan Pablo Toro

Autor Deportista Nómade

El mejor consejo que me han dado en mucho tiempo

Meses atrás estuve conversando con Nicolás Marino, un amigo de Argentina que ha viajado por todo el mundo en bicicleta.

Como él tiene 43 y yo 26, aproveché de hacerle muchas preguntas sobre cómo lidiaba él con las preocupaciones que tengo actualmente sobre mi futuro.

Una de esas preguntas fue la siguiente:

¿Fue difícil para ti volver a la vida cotidiana después de tantos años de viaje?

Con esta pregunta, yo me esperaba que Nico me diría que sí, que después de años de libertad máxima y aventuras increíbles, al volver a la vida cotidiana se sintió como un hámster atrapado entre un departamento enano y una oficina, solo que en lugar de agitar el corazón corriendo en una rueda, subiéndose a una bicicleta de spinning.

Sin embargo, Nico me respondió lo siguiente:

«No, porque trato de que las circunstancias externas no determinen mi bienestar.
Si solo puedo sentirme realmente feliz cuando los tiempos son buenos, cuando puedo hacer lo que realmente amo, que en mi caso es viajar, entonces estoy condenado. La vida simplemente no funciona así.
Mi felicidad no puede depender de que las cosas salgan como yo quiero, porque en algún momento saldrán mal. Es inevitable. La certeza es una ilusión, todo es transitorio.
Entonces, creo que es muy importante para mí valorar las cosas buenas de la vida, lograr una sensación de bienestar en cualquier lugar y en cualquier momento.
No siempre es fácil. Es un ejercicio diario y un trabajo duro. Se necesita enfoque, dedicación y determinación, pero creo que vale la pena. Creo que es mejor que vivir en ciclos extremos de felicidad o miseria, estar contento o profundamente insatisfecho, y ser arrastrado arriba y abajo brutalmente como una muñeca de trapo por los cambios aleatorios que la vida nos presenta.»

Nicolás Marino recorriendo el Congo


La respuesta de Nico me llamó la atención.
Como típico mal oyente que no es capaz de retener toda la información que le dicen, tuve que simplificar su mensaje para que se me quede grabado:

Aprender a estar bien sin importar dónde esté, o con quién esté, o qué es lo que esté haciendo.

Tiene sentido.

Acudir a nuestra propia mente para mantener la calma y alegría, sin importar lo que esté pasando en el exterior.

Sin importar si tenemos una mansión o si llevamos meses viviendo en una carpa, estar bien.

Sin importar si tenemos pareja o estamos solteros, estar bien.

Sin importar si hay sol o si nos está mojando la lluvia, estar bien.

Sin importar si estamos viajando por Nepal o si estamos encerrados en la cuarentena por el Covid-19, estar bien.

No buscar que salga todo perfecto. Eso provoca falsas expectativas y decepción.

Aceptar la situación en la que estamos, sea buena o mala.

Evaluar qué está en nuestro control, y qué no.

Aprovechar al máximo nuestras vidas, dada la situación y las limitaciones de cada momento.

Entrenar la mente para saber estar bien, sin importar dónde, con quién, y qué es lo que estemos haciendo.

Juan Pablo Toro
Juan Pablo Toro

Autor Deportista Nómade

Trekking en Dolomitas, relatado en fotos

Ya habiendo completado dos de cuatro trekkings en un mes (en Rumania y Eslovenia), hice dedo para llegar al tercer trekking en la región de las Dolomitas, Italia.

Siete autos me dejaron en la entrada de un trekking con esta vista. Una de las personas que me llevó era una italiana que iba comiendo pizza y escuchando Plácido Domingo a todo volumen. Cada vez que había una curva y se mostraba un nuevo paisaje ambos exclamábamos «Bellissimo!!»
Tre Cime es uno de los trekkings más famosos de Italia. Justo el día que subí había un feriado nacional. Creo que nunca había visto tanta gente en una montaña
Café con buena vista
Dolomitas es una región enorme, llena de bosques y pueblitos pequeños con estas vistas a la montaña
Trekking a Cinque Torri, también en la región de las Dolomitas
El alojamiento era ridículamente caro, así que ni pensar en pagar por una pieza. Cada noche me escondía en el bosque a acampar en silencio, y al día siguiente buscaba un río para bañarme
¿A quién más le gustaría vivir en esta cabaña a tiempo completo?
Me estaba bañando en calzoncillos en este río, y pasó por al lado mío toda una familia con los niños caminando.
Ya muy cansado, hice dedo para llegar a Trento con la esperanza de que alguien me aloje y así poder lavar mi ropa. Terminé durmiendo en un parque dentro de la ciudad
Pasé tres días en Milán esperando un vuelo a Islandia. Es la ciudad que menos me gusta en el mundo, pero me comí esta hamburguesa exquisita!
Juan Pablo Toro
Juan Pablo Toro

Autor Deportista Nómade

Laugavegur trail y viaje a dedo por Islandia, relatado en fotos

Después de mi tercer trekking en un mes por Dolomitas (Italia), tomé un avión a Reykjavik, Islandia. Objetivo en este país: completar el Laugavegur Trail.

Reykjavik, la capital de Islandia. Viven 180.000 personas
Reykjavik
Islandia es carísimo, así que ni pensar en pagar por alojamiento. Por suerte en internet hay gente simpática que se ofrece a alojarte
Viajé a dedo para llegar a la empezada de Laugavegur trail en Skógafoss, una cascada famosa
El primer día de trekking consistía en caminar en sentido contrario a este río
A lo largo del río habían 22 cascadas enormes
ovejas islandesas
A los islandeses les gustan los licores dulces como este Opal.
Islandia, tierra de volcanes
Mi disposición para pagar por un camping era 0, así que cada día me escondía para acampar tranquilo sin que me encuentre un guardabosques
Glaciar gigantesco que se ve desde el camino
Paisajes impresionantes que cambian radicalmente cada pocos kilómetros
Yo no podía estar más feliz caminando por aquí, pero poco rato después de esta foto me encontré con dos mujeres que lloraban de miedo porque era el primer trekking que hacían en sus vidas. Me hizo pensar en cómo influye la preparación que tienes en una experiencia. El mismo escenario puede ser algo increíble, o una pesadilla.
Quería viajar liviano, así que de comida tenía un par de paquetes de quinoa y un par de paquetes de lentejas. Y para saciar el antojo por algo dulce, una cucharada de miel al día.
Se hizo tarde, y se levantó un viento brutal. Estuve una hora buscando un lugar donde refugiarme, hasta que finalmente decidí cubrirme detrás de esta roca. Mala idea
A las 5 am el viento cambió de dirección y casi me vuela la carpa. A las 6 am ya estaba caminando
Pasé por un paisaje plano y cubierto por ceniza volcánica. Debe ser lo más parecido a la luna que debemos tener aquí en la Tierra
Me encontré con Steven, un americano de mi edad que me dijo que al día siguiente iba a haber una tormenta brutal que nos dejaría atrapados sin importar dónde nos refugiemos. Junto a él y dos franceses decidimos caminar 34 kilómetros en un día para terminar el trekking sin problemas
Frío
Vapor que sale de la tierra
Steven, músico estadounidense. Gran tipo!
Uno de los franchutes. Olvidé su nombre
Maravilla! después de doce horas de caminata, al final del trekking había un arcoiris completo. También habían termas naturales y un lugar donde acampar
Como mi trekking terminó antes de lo esperado, no sabía qué hacer con el resto de mis días en Islandia. Decidí ponerme a hacer dedo en dirección oeste, hacia los westfjords
En uno de los autos que me llevaron se subió también una polaca que estaba cruzando Islandia a pie junto a su perro
Me llevaron a dedo dos alemanes que estaban estudiando un doctorado de química en Suiza. Me hablaron sobre Henry Kissinger y sobre el mundillo tóxico de los doctorados
roadtrip!!
Junto a los alemanes llegué a la cascada más bonita que he visto
Westfjords
Llegué a un pueblo llamado Isafjorour, en los Westfjords. Mi objetivo era quedarme tres días ahí y hacerme amigo de todos los locales
En tres días no conocí a un solo local
Todas las noches me iba a un bosque a las afueras del pueblo para acampar
Si bien no logré mi objetivo de conocer a la gente local, una noche vi auroras boreales!
Hice dedo para volver lentamente a Reykjavik (eran 7 horas de manejo). Al poco rato me recogió un islandés que ofreció llevarme directamente a mi destino. Paramos a bañaros en unas termas y hablamos de podcasts, gente loca, hongos alucinógenos y la vida en general
En Reykjavik me volví a encontrar con Steven y otro americano llamado Dan, que no podía estar más enfermo
En mi último día en Reykjavik el mar estaba tan tranquilo que parecía confundirse con el horizonte.

Siguiente destino: Suecia para juntarme con mis papás y mi hermano después de 13 meses sin verlos.

Juan Pablo Toro
Juan Pablo Toro

Autor Deportista Nómade

Trekking en Eslovenia relatado en fotos

Después de caminar una semana en Rumania, paré a descansar unas noches en Budapest, y tomé un tren para llegar al segundo trekking de un total de cuatro, en Eslovenia.

¿Por qué Eslovenia?

En Enero de 2020 me encontraba en Nepal conversando con un alemán que aseguraba que en Eslovenia estaba el trekking más bonito del mundo. Quería comprobarlo yo mismo.

Un bus nocturno en donde no dormí nada me dejó a las 6 de la mañana en Ljubljana, la capital de Eslovenia. Tuve el centro de la ciudad al amanecer para mí solo.
Ese mismo día tomé otro bus a Kranska Gora, un pueblo que queda al borde del único parque nacional de Eslovenia: Triglav
La gente viene a Kranska Gora a hacer trekking y relajarse en esta laguna
Los Alpes Julianos en el Parque Nacional Triglav. Sin lugar a dudas uno de los lugares más bonitos que he visto
Está prohibido acampar en el Parque Triglav, pero en una semana no vi un solo guardabosques monitoreando. Y como yo no hago fogatas y me llevo mi basura, me di el privilegio de acampar de todos modos
Ducha diaria en un riachuelo
Hay decenas de refugios repartidos por todo el Parque. Puedes parar a tomarte un café y comer un plato casero
Este día cumplí un año de viaje sin volver a Chile
Plato típico en Eslovenia. No me acuerdo el nombre, pero era carne molida acompañada con un repollo fuertísimo
En este parque también hay un centro de Ski donde la gente viene a saltar tanto en invierno como en verano. Paré por una hora a ver a esta gente loca que eligió como deporte volar por los aires como ardillas. Lo que más me llamó la atención fue que cuando aterrizaban no decían nada, parecían robots. Yo estaría gritando por la adrenalina!
Hubo un día en que calculé mal la comida y tuve que caminar hasta las cuatro de la tarde en ayunas. Finalmente llegué a un pueblito y me comí la mejor pizza de mi vida.
Ya cansado después de varios días de trekking, terminé de caminar en Ukanc, me bañé en la laguna, y empecé a hacer dedo para llegar a mi tercer trekking del mes en Dolomitas (Italia).
Juan Pablo Toro
Juan Pablo Toro

Autor Deportista Nómade